Andrés Goycoolea, Jefe Subrogante del Servicio de Neurocirugía Pediátrica del INCA:
“Toda nuestra experiencia nos convierte en el equipo con mayor resolutividad del país en Neurocirugía Pediátrica”
Como Jefe Subrogante del Servicio de Neurocirugía Pediátrica del INCA, Andrés Goycoolea trabaja actualmente 33 horas semanales en el Instituto, lugar que también lo recibió como centro de formación entre los años 2010 y 2014, tras lo cual continuó trabajando en Urgencia, para luego desempeñarse en el servicio que ahora lidera.
Son 12 años como parte del INCA, período durante el cual, a su juicio, “al ser un hospital ‘pequeño’ los funcionarios nos relacionamos de una manera muy personal; la mayoría nos conocemos hace mucho tiempo y se tiene un trato muy familiar cuando esto pasa. Eso hace que trabajar aquí sea muy agradable”.
¿Cuáles son las principales patologías neuroquirúrgicas que atiende el INCA, en el área pediátrica?
Cerca de la mitad del trabajo que hacemos en Neurocirugía Pediátrica tiene relación con el tratamiento de la hidrocefalia y sus complicaciones. También somos centro de referencia nacional de tumores complejos y tenemos la casuística más grande del país en cirugía por malformaciones cráneo faciales, además de hacer cirugía de epilepsia, disrafias y cirugía de columna.
¿Existen equipos de trabajos especializados?
La verdad es que la Neurocirugía Pediátrica maneja volúmenes de pacientes mucho más pequeños que los equipos que atienden adultos. Esto hace que sea muy difícil que algún neurocirujano vea solamente una patología en específico, es decir, todos tenemos que hacer de todo. Pese a lo anterior en nuestro centro tenemos gente que se ha capacitado en el país y en el extranjero para atender patologías específicas. Es el caso del Dr. Osvaldo Koller, neurocirujano pediátrico con amplia experiencia en cirugía de columna pediátrica; el Dr. Juan José Marengo, formado en Alemania para realizar cirugía de Epilepsia; el Dr. Gabriel Campos, que se capacitó en Estados Unidos para hacer cirugía Endoscópica; y los Doctores Claudia Cataldo y Roberto Requena, que han realizado diversos cursos y capacitaciones en cirugía cráneo facial.
¿Cómo se distribuye el trabajo entre sus funcionarios neurocirujanos?
Sin duda, ¡No se trata de una labor fácil! Entre nuestras funciones tenemos que atender a los pacientes hospitalizados y que consultan de manera ambulatoria, operar las cirugías programadas, las urgentes y cumplir labores administrativas y docentes, entre otras. La distribución del trabajo se hace principalmente basados en la jornada laboral que cada cirujano tiene en este hospital según las horas de su contrato y el horario pactado con la jefatura.
Según lo anterior cada cirujano tiene días de atención ambulatoria y de cirugía programada que se planifican al menos con una semana de anticipación. También se toman en cuenta los intereses de los distintos colegas. Por ejemplo, aquellos que tienen interés en realizar labores administrativas o docencia tienen programado en su horario contratado tiempo para desempeñar esas funciones.
¿Cómo es un día normal en el Instituto de Neurocirugía?
Todos los días iniciamos la jornada con una reunión a las 8:00 de la mañana. En esta reunión el neurocirujano que estuvo de turno el día anterior, nos cuenta todos los casos que ingresaron al hospital o fueron operados durante el turno. Así quedan encargados para vigilancia por el equipo de Neurocirujanos Staff y, de esta forma, el médico que llega a hacer el turno, se entera de lo ocurrido el día anterior. Luego de esto en la misma reunión revisamos la evolución de todos los pacientes hospitalizados, decidiendo el plan a seguir. Una vez discutidos los planes, visitamos a cada paciente para conversar con sus padres e informarles lo que se decidió en la reunión. Esto se extiende casi todos los días hasta las 10 de la mañana.
¿Cuáles son las unidades de apoyo relevantes para el desarrollo de la Neurocirugía?
Esa es otra gran virtud de nuestro servicio. Por estar en un hospital muy especializado en Neurocirugía, contamos con excelentes especialistas que apoyan nuestro trabajo. Lo principal es que contamos con un Servicio de Urgencia donde tenemos neurocirujanos formados en Pediatría las 24 horas del día casi todos los días del año. Esto resuelve la demanda de atención especializada en Neurocirugía Pediátrica de gran parte de Santiago y del país, además que nos permite operar de manera programada a pacientes de alta complejidad y asegurarles vigilancia post operatoria permanente.
Otros servicios vitales para nosotros son el de Paciente Crítico Pediátrico, con cuyo equipo revisamos los casos en reuniones diarias y otros como Neurorradiología, Neuropatología y Neurofisiología. La manera en que nos coordinamos es mediante reuniones periódicas donde analizamos los casos complejos desde una mirada multidisciplinaria.
“Lo principal es que contamos con un Servicio de Urgencia donde tenemos neurocirujanos formados en Pediatría las 24 horas del día casi todos los días del año. Esto resuelve la demanda de atención especializada en Neurocirugía Pediátrica de gran parte de Santiago y del país”
¿Cómo es la lista de espera Neuroquirúrgica Pediátrica del INCA? ¿Qué medidas se han tomado para hacer más eficiente este proceso?
Actualmente tenemos cerca de 70 niños esperando cirugía en el Instituto, este número es extremadamente bajo en comparación con el equipo de adultos u otros hospitales de la red. Esto se debe principalmente a que hemos defendido un pabellón protegido para operar niños de lunes a viernes en nuestro hospital, lo que hace que rara vez un niño tenga que esperar más de tres meses para poder resolver su enfermedad, cualquiera sea su diagnóstico o complejidad.
¿Qué otros centros resuelven la patología Neuroquirúrgica en la Región Metropolitana?
En Santiago, los Hospitales Dr. Roberto del Río y Sotero del Río también tienen un neurocirujano exclusivo para patología pediátrica en turno de 24 horas. Además, los Hospitales Luis Calvo Mackenna y Clínico San Borja Arriarán cuentan con neurocirujano pediátrico, pero solo en horario hábil.
“Hemos defendido un pabellón protegido para operar niños de lunes a viernes en nuestro hospital, lo que hace que rara vez un niño tenga que esperar más de tres meses para poder resolver su enfermedad”
Los pabellones poseen todos los elementos para desarrollar una Neurocirugía de vanguardia?
Los pabellones del Instituto por lo general son adecuados para la actividad quirúrgica, poseen la gran mayoría de los elementos que se requieren para hacer Neurocirugía compleja, algunos insumos o especialistas que participan de la cirugía son de alto costo y puede hacerse difícil coordinar para que el hospital los compre o provea de manera extraordinaria cuando se requieren, pero en la mayoría de los casos, los insumos están y son de buena calidad.
¿Cuáles son las principales fortalezas que tiene la actividad neuroquirúrgica pediátrica en el INCA?
Contamos con un equipo de cirujanos formados en Neurocirugía Pediátrica en Chile y en el extranjero, atención de Urgencia las 24 horas casi todos los días y operamos cerca de 500 pacientes pediátricos al año, lo que nos hace el hospital de mayor volumen en Chile para esta especialidad. Toda esa experiencia nos convierte en el equipo con mayor resolutividad del país. Recibimos solicitudes de traslado de pacientes desde todo Chile, incluso desde los otros hospitales de Santiago que sí cuentan con Neurocirugía Pediátrica, pero que muchas veces no tienen la capacidad de resolver patologías complejas. A mi parecer la experiencia y el equipo médico que tenemos en el Instituto, son nuestra mayor fortaleza.
¿Cómo proyecta el nuevo INCA y la atención de los pacientes en este?
Me lo imagino grande y bonito, cómodo para los niños y sus padres que los acompañan durante la hospitalización. Imagino que la nueva infraestructura está pensada para dar un trato digno y comodidad a esas familias, que dejan todo para acompañar al niño enfermo. De esta forma, nuestra atención podría ser más cercana y participativa al incorporar a los padres en la recuperación de sus hijos.
Además, en un ambiente que cumpla las expectativas de los funcionarios, estos trabajarían más felices y facilitaría que más profesionales de la salud quieran permanecer o desempeñarse en el sector público. La implementación de un nuevo hospital de estas características me parece vital para potenciar este servicio.
“Contamos con un equipo de cirujanos formados en Neurocirugía Pediátrica en Chile y en el extranjero, atención de urgencia las 24 horas casi todos los días y operamos cerca de 500 pacientes pediátricos al año, lo que nos hace el hospital de mayor volumen en Chile para esta especialidad”